Lipoescultura de papada con Lipo láser
Lipoescultura de Papada
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Cuando hablamos de la cirugía de Lipo láser nos referimos a una fibra óptica que conduce luz láser de forma transcutánea la cual se introduce en el organismo para lograr destruir, derritiendo la grasa acumulada en la zona a tratar para luego ser extraída o lipoaspirada. Esta tecnología a la vez permite contraer la piel para mejorar considerablemente la elasticidad de la zona.
- Zonas a tratar -
Al igual que la lipoescultura tradicional, la lipo láser puede tratar zonas en donde se acumula usualmente la grasa, exceptuando casos en pacientes con obesidad mórbida y otros casos complejos. Las zonas a tratar más frecuentes son el contorno abdominal, la papada, los brazos, las piernas, el rollito del sostén y en exclusivamente en hombres los pectorales (ginecomastia).
- Características de la cirugía -
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La tecnología permite derretir el tejido adiposo de tal forma que al completar el procedimiento de lipoaspirado logra marcar y pegar la piel al cuerpo zona, gracias a una cánula especial de origen alemán que permite lipoaspirar el tejido adiposo que se encuentra pegado al músculo. La lipoaspiración logra extraer hasta un 99% del tejido. Este es un gran plus con respecto a la lipoescultura tradicional.
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El láser permite entregar un efecto coagulativo sobre la microcirculación evitando hematomas y parte del sangrado.
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Se puede en estos casos utilizar anestesia local, lo cual favorece la comodidad del paciente al estar consiente durante la cirugía y permite una recuperación más rápida.
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Se utiliza en muchos casos para retocar o perfeccionar zonas que la lipoescultura tradicional no logró.
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El láser cuenta con una longitud de onda que permite calentar el agua de la dermis y el tejido graso para producir nuevo colágeno y mejorar la elasticidad de la piel considerablemente.
- Resultados de la cirugía -
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Rápida recuperación, en aproximadamente 5 días el paciente puede volver a sus actividades regulares.
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En tan solo 2 semanas ya es posible notar los cambios reales de la cirugía, siempre acompañado de un buen proceso postquirúrgico.